miércoles, 13 de octubre de 2010

VOY A CRUZAR LA FRONTERA

He recogido manzanas rojas
del árbol de la séptima avenida,
es jueves,
el tren sale al mediodía.
Dice el hombre del tiempo
que la lluvia es una amenaza
y que el viento azotará las costas del norte.
La maleta pesa,
pesa tanto como un viaje de ida,
como los libros de blackie books
que pienso leer pegado al mar,
como una excavadora
de las que siempre aparecen
en las películas de marc recha.
Voy a cruzar la frontera,
la que me aleja de la incertidumbre,
la que me sitúa justamente del lado del futuro.