martes, 11 de agosto de 2009

SEVEN SISTERS



Lo primero que se me viene a la cabeza cuando veo este nombre es una posible novela de género negro, esa es la idea que me sugiere “Seven Sisters”, cuando vas más allá y descubres que es el nombre que recibe un parque natural del condado de Sussex (Brighton) en alusión a los siete acantilados que lo presiden, ese desliz detectivesco salta al celuloide en blanco y negro: imaginas un disparo en la noche lluviosa, un fundido a un coche de policía, un comisario corpulento examinando el lugar del crimen, un abrupto acantilado y el mar furioso que se ha tragado el cuerpo de la víctima, una rebeca de lana manchada de sangre como única prueba de que la hija del millonario banquero londinense estuvo allí, antes de, supuestamente, caer al vacío, pero todas las miradas recaen en el joven aparcacoches que mantenía relaciones sexuales con la chica. James Hadley Chase podría haber escrito esta historia después de “El secuestro de miss Blandish” (novela, por cierto, muy recomendable), en un paisaje mucho más cercano y conocido para el autor londinense que sus habituales escenarios norteamericanos. En realidad, Seven Sisters (como transmite la foto) debe ser un lugar luminoso, que invita a la contemplación. El resto de esta historia reside en mi imaginación y en la idea de dar una vuelta de tuerca a los viajes ajenos de mis amigos/as. Ya nos contará Noelia qué sucede realmente en estos acantilados, qué se respira en la costa virgen de Sussex.